¿En qué consiste su trabajo?

Soy el Director Técnico de la planta de fabricación de Jaén de la firma internacional B. Braun. Aquí fabricamos inyectables de llenado aséptico. Las ampollas y viales de pequeño volumen son nuestra especialidad. Fabricamos especialidades muy variadas en líquido y polvo de llenado aséptico, por ejemplo, adrenalina, morfina o atropina.   
 
¿Cómo está viviendo esta situación?

Supongo que como todos los que nos dedicamos al sector industrial, estamos teniendo un gran volumen de trabajo. Nos encontramos en una situación que nadie esperaba y tenemos que dar respuesta a la demanda que hay ahora. Al igual que el resto de los compañeros farmacéuticos a nivel comunitario estamos viviendo esta situación con mucho estrés pero también con un fuerte compromiso. Los que nos dedicamos a la fabricación, aunque no hacemos vacunas, debemos atender la demanda de producción de medicamentos que se utilizan en cuidados intensivos y eso es una gran responsabilidad.
 
¿Cómo ha influido la pandemia en su trabajo?

Como ya le he dicho, estamos trabajando mucho, incluso llegamos a suspender los periodos vacacionales de Semana Santa para poder responder a la demanda. Doblamos turnos para poder fabricar las 24 horas al día, 7 días a la semana, para satisfacer la gran demanda. Incluso, en el primer Estado de Alarma, las autoridades se pusieron en contacto con nosotros para controlar el stock y para ver cómo iba la fabricación y la planificación de la producción.
 
Por tanto, el trabajo en sí no nos ha cambiado, lo que ha cambiado es la intensidad y la presión. Hemos tenido que seguir fabricando y liberando producto de calidad de manera muy ágil y muy atentos a los cambios. Pero no solo mi sección, toda la planta, tanto fabricación como Control de Calidad, Mantenimiento, Ingeniería, Logística… En total, los más de 200 trabajadores que somos en Jaén, nos hemos volcado con ofrecer lo mejor de nosotros en esta situación.